Los pellets de madera se queman muy limpiamente, por lo que son una fuente de combustible extremadamente eficiente.
El controlador inteligente monitorea la temperatura en la cámara de la parrilla, ajustando tanto la cantidad de pellets alimentados a la olla de fuego desde la tolva como el flujo de aire hacia el fuego.
Los gránulos se queman tan limpiamente que solo quedan cucharaditas de ceniza después de horas de cocción y se pueden quitar en segundos con una aspiradora. Las rejillas de la parrilla están recubiertas de cerámica, lo que facilita la limpieza sin tener que restregar mucho.